MUY INTERESANTE
EDICIÓN NÚM 2


TODAS LAS GANADERÍAS ACTUALES PROCEDEN DE CINCO CASTAS FUNDAMENTALES.-

        Aunque la variedad de ganaderías en el campo bravo, tanto español como internacional, es enorme, hay que recordar que los distintos hierros y encastes tienen su origen en cinco troncos o castas: Jijona, Navarra, Cabrera, Vazqueña y Vistahermosa.

        La casta Jijona se remonta a la vacada que formó, a mediados del siglo XVII, D. Blas Jijón de Villarrubia. Sus toros se reconocían por la capa colorada, predominante en las reses. La Navarra, que no suele incluirse en las fundacionales, no tiene un origen unificado, y comprende a las diversas ganaderías que pastaban hace dos siglos en el norte de España. La casta Cabrera parece tener su origen en Cádiz, en los toros que reúne D. Luís Antonio Cabrera en Utrera en los primeros años del siglo XVIII. Los toros de Miura son sus más directos herederos en la actualidad.

        El Conde de Vistahermosa es el encargado de fundar, también en el siglo XVIII, la casta que lleva su nombre. En la actualidad, su sangre es la que predomina, de forma mayoritaria en el campo español. Por último la casta Vazqueña también se enclava en Utrera con reses de D. Gregorio Vázquez. La vacada la adquirió después el rey Fernando VII, y el duque de Veragua le dio la fama posterior.

 

A LOS BECERROS SE LES HIERRA CUANDO TIENEN EN TORNO AL AÑO DE EDAD.-

        El proceso de herrar a un becerro, por el que pasará a formar parte “oficialmente” de la ganadería, suele ocurrir cuando tiene en torno a un año de edad, este día también es un día festivo en la finca. El hierro y la señal están destinados a distinguir las reses de las otras ganaderías.

        Por su parte el número que se les pone cumple la función de distinguir a cada animal dentro de la misma ganadería. El acto de herrar se puede realizar básicamente de dos formas: Bien sujetando entre varias personas al becerro; o bien, introduciendo a este en una especie de cajón, de pie, donde queda inmóvil.

        La señal se suele hacer con una navaja y se llama “fañar”. Hay muchas combinaciones, pero los cortes esenciales son: PUNTA DE ESPADA, doble corte en la parte externa de la oreja; MUESCA, corte pequeño en la parte superior , dejando desprenderse el trozo correspondiente; PUERTA, mismo corte pero en la parte inferior, en forma de arco; HORQUILLA, rajar la punta de la oreja; ZARCILLO, corte en la parte inferior de la oreja, para que se quede un trozo desprendido. Se pueden hacer en una o en las dos orejas, existiendo múltiples combinaciones: Ahigarado, Ahorca, Brincada, Descuarte, Despuntado, Desgarrado, etc.

 

EL 14-10-1860 UN TORO TOMA CINCUENTA Y TRES VARAS.-

        Se lidia en la plaza de toros de Zaragoza el toro “Llavero” de Nazario Carriquiri, que mereció a petición del público ser retirado vivo al corral, por haber tomado cincuenta y tres puyazos sin volver la cara. El encargado de su lidia fue José Manzano “El Nili”.

 

EL 12-10-1882 UN TORO SALTA LA BARRERA CATORCE VECES.-

        Se lidia en la plaza de Madrid el toro “Pomado”, de la ganadería de Ildefonso Sánchez Tabernero. El animal saltó la barrera catorce veces, y lo intentó nueve más. En una de las ocasiones en las que estuvo en el callejón, intentó subir al tendido, llegando a meter la cabeza entre las maromas.