JULIO ROBLES

         

Avelino José Robles Hernández nace en Fontiveros (Ávila) el día 4 de diciembre de 1951. Por motivos de trabajo de su padre se traslada de muy niño a La Fuente de San Esteban (Salamanca). Torea su primera becerrada en 1965 y tres años más tarde, el 28 de agosto de 1968, viste por primera vez el traje de luces en Villavieja de Yeltes.

Torea más de cuarenta novilladas sin picadores y debuta con ellos el día 10 de mayo de 1970 en Lérida, con ganado de María Lourdes Martín, compartiendo cartel con Paco Núñez y Avelino de la Fuente. Después de más de setenta novilladas con los del castoreño, en el año 1972 hace su presentación en Sevilla y Madrid cortando una oreja en cada actuación.

       Recibe la alternativa de manos de Diego Puerta y con Paco Camino como testigo el día 9 de julio en la Monumental de Barcelona, estoqueando al toro “Clarinero”, de la ganadería de Juan Mari Pérez Tabernero. En ese año toreó un total de veintiocho corridas de toros, triunfando en Bilbao y Salamanca.
          Confirma la alternativa en Madrid el día 22 de mayo de 1973, de la mano de Antonio Bienvenida como padrino y Sebastián Palomo Linares como testigo de la ceremonia, y con el toro “Pernote” de la ganadería de Eusebio Galache.

          Los aficionados de Las Ventas, donde hizo el paseíllo durante setenta y dos tardes, le convirtieron en uno de sus toreros predilectos. En esta plaza fue herido de gravedad en el año 1980 y logró dos salidas a hombros en 1983 y 1985, la primera tarde al desorejar a un astado del Puerto de San Lorenzo y la segunda con un lote de “Aldeanuevas”. Todas las temporadas de la década de los ochenta, se vistió de luces en nuestro país, siempre por encima de los cincuenta festejos.

            La temporada de 1989, fue la mejor de su carrera artística, porque además de lograr otra puerta grande en la feria de otoño de Madrid realizó faenas muy importantes en distintas plazas de gran relevancia, destacando las orejas que le cortó a una corrida de Manolo González en Sevilla, ese año toreó en sesenta y tres ocasiones. 

            En 1990, el día 13 de agosto en la localidad francesa de Beziers el toro de nombre “Timador” de la ganadería de Cayetano Muñoz, le volteó cuando toreaba de capa ocasionándole una tetraplegia incompleta. Desde aquel fatídico día y hasta el 14 de enero de 2001, a las cinco de la tarde, en que falleció por una perforación de cólon, Julio Robles vivió sentado en una silla de ruedas.

            En esta sección que vamos a dedicar al análisis de las grandes figuras del toreo de todos los tiempos, hemos querido iniciarla haciendo un pequeño homenaje a modo de recordatorio analizando todos los hechos más destacados acaecidos en la trayectoria profesional del matador de toros Julio Robles, el cual falleció en enero de este año.
 

A.Marín